
Técnica de craquelado con pintura estilo "flotado"
Hace tiempo que guardaba una vieja cajita de lapices que había encontrado tirada no se donde y hoy decidí reconvertirla en una caja para guardar mis pinturas de oleos, para ello solo he necesitado pinturas acrílicas, pinceles, barniz y craquelador de un solo paso.
La técnica del craquelado consiste en forzar la aparición de grietas sobre la superficie pintada o barnizada imitando el típico envejecimiento causado por los años sobre las maderas pintadas.
Existen varias formas de forzar un craquelado, antiguamente se utilizaba dextrina aplicada en caliente sobre el barniz, para reemplazarse mas adelante por goma arábica y barniz acrílico, pero hoy en día utilizamos un medium craquelador que es mas cómodo de trabajar y nos da siempre buenos resultados.

Cuando este bien seco y brillante (el craquelador debe quedar con brillo, si quedan zonas mate, volver a aplicar otra capa pues la superficie lo ha absorbido y no obtendremos el resultado deseado), aplicar seguidamente la pintura acrílica, contrastada en color con la que utilizamos de base y empezaran a aparecer las grietas que al romper la pintura de arriba nos mostrara el color de la de abajo.

Yo utilicé el color de madera para la base, apliqué encima una capa de craquelador y lo deje secar 2 días, seguidamente apliqué una buena capa de pintura acrílica color azul y lo deje secar otro par de días hasta conseguir el resultado que se aprecia en la foto.
Rebuscando por internet encontré un bonito dibujo de una paleta de pintura con pinceles y decidí decorar la caja con este motivo, por lo que lo trace a mano alzada y aplique una base de blanco por todo su contorno rellenando seguidamente para que los colores que aplicaría después no tuviesen influencia del azul de base.
Ya seca la capa de blanco, aplique los colores base a cada una de las formas, para la paleta utilice un tono tierra, gris claro para el metal de los pinceles y con lila, amarillo, rosa, verde rojo y azul oscuro aplique color a pinceles y manchas de pinturas de la paleta.
El craquelador aun consiguió atravesar los colores aplicados y romper las pinturas de forma que casi todos los colores están surcados por tenues lineas que le dan al dibujo una interesante apariencia de envejecimiento.

Terminado todo, lo único que falta es aplicar una generosa capa de barniz mate o satinado a pincel para proteger el trabajo.
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